Te hablaba hace unas semanas sobre cómo hacer tu propia fotografía de producto.
Hoy para terminar de hablar del tema, voy a explicarte varios errores que tienes que evitar cometer.
Cuántas veces te ha sucedido que haces una fotografía que en tu mente es sencillamente preciosa, incluso en la pantalla de la cámara se ve genial y cuando la pasas al ordenador…
‘oh, horror, esto no es lo que yo quería’
Tranquila, no eres la única, a mi me pasó con algunas fotografías que hice en Nueva York.
Y me fastidió tanto haber echado a perder esas fotos que me comprometí conmigo misma a mejorar y a no caer en los mismos errores jamás.
Además de autoprometerme volver a NYC para repetirlas…
Ya sea porque tienes un blog, una tienda online o una cuenta en Instagram, seguro que te interesa saber como evitar esos errores ¿verdad?
Pues, ¡dentro consejos!
En general, creo que todos conocemos el estilo general que se lleva.
Tan solo hay que darse una vuelta por las cuentas más ‘cool’ de Instagram o por cualquier revista de decoración para ver que lo ideal son fotografías con un protagonista claro, llenas de luz y nítidas.
Entonces… ¿Dónde cometemos los errores?
Fondos que distraen
Sí, como lo oyes, no es que todos los fondos tengan que ser lisos y sin gracia.
Es que han de estar en armonía con la imagen.
Pon un mantel manchado o con una arruga y la mirada del espectador irá allí… ¡Es como un imán!
Lo mismo con fondos demasiado enfocados, recargan la imagen y no se sabe donde mirar.
Así que desenfoca ese fondo y lo que quede enfocado procura que esté en condiciones.
Exceso de atrezzo
Seguro que te ha pasado alguna vez, ves una fotografía con una composición y hay algo que chirría.
No es que haya demasiados accesorios (minimalismo ante todo) pero hay algo que falla en esa composición de:
jarrón + libreta + bolígrafo dorado + alguna chorradilla más
Perdón por la descripción de la fotografía, pero seguro que así sabes a lo que me refiero, esas composiciones tan usadas en los blogs de emprendimiento femenino.
Volviendo al tema, a veces ves esas fotos y… aissss, que hay algo que no funciona.
Y a lo mejor se parece mucho a una que te gusta, pero no, esa no te gusta tanto…
Sencillamente hay algo que no aporta nada, es como un relleno de más.
Mi consejo aquí es que hagas las fotografías con calma, que pruebes varias composiciones y hagas variaciones.
No te limites a hacer una foto y listo.
Usar el Flash directo
No es que no se pueda utilizar Flash para una fotografía de producto, de hecho puede ser incluso recomendable según cómo hagas las fotos.
Peeero…. no el del móvil, que en mi humilde opinión el uso de ese led infernal debería ser relegado al de linterna.
Si tienes una cámara reflex y un flash externo utilízalo siempre rebotado o con un difusor, aportará luz sin quemarte la fotografía ni crear sombras y contrastes fuertes.
Fotos movidas
Bueno, esta cae de cajón, asegurate bien de que las fotos no están movidas, toma varias fotografías y si tienes poca luz o mal pulso, apoya bien la cámara y utiliza el auto disparador.
Fotografías subexpuestas o sobreexpuestas
Por si no te aclaras con los conceptos:
- Subexpuesta: hay poca luz y la fotografía se ve oscura
- Sobreexpuesta: hay demasiada luz y la fotografía se ve tan blanca en algunas zonas que se pierden los detalles
Si utilizas una reflex tendrías que perderle el miedo a modificar la exposición mediante el ISO, la velocidad de obturación de tu cámara y la apertura.
¿Las fotografías te salen subexpuestas?
Prueba a subir un poco el ISO (no te pases, o aparecerá ruido), bájale la velocidad de obturación (mejor con un trípode o algún sitio donde apoyar la cámara) o aumenta la apertura del objetivo.
¿Salen sobreexpuestas?
Pues haz lo contrario, bájale el ISO, súbele la velocidad de obturación o disminuye la apertura.
Si lo que utilizas para tomar las fotos es el movil, prueba a moverte tu o el objeto que quieres fotografiar.
Busca el lugar idóneo para hacer la fotografía, donde reciba luz indirecta y prueba a hacer la fotografía desde el mismo sitio desde donde llega la fuente de la luz.
Demasiadas sombras
A veces vamos buscando tanto la fuente de luz natural que terminamos consiguiendo demasiada.
Si la luz que usas es muy directa, el propio objeto proyectará unas sombras que pueden estropearte la foto.
Lo ideal, claro es tener luz indirecta, si no es factible, tendrás que difuminar la fuente de luz directa.
¿Cómo? Con el uso de difusores.
Algo tan sencillo como una cortina blanca fina hará de difusor de luz y anulará esas sombras.
¡Ah! y también te vendrá bien utilizar un reflector.
El reflector lo que hace es que rebota la luz que recibe y se la devuelve al objeto que vas a fotografiar, minimizando las sombras.
Pero si quieres una solución rápida, puedes probar con una cartulina blanca grande, colocándola en el lado contrario a la fuente de la luz para que la rebote hacia el objeto a fotografiar.
Y hasta aquí los errores con los que más me encuentro ¿Que tal? ¿Cometes alguno de ellos?
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