Título original para un post lo se, pero si lo ponía todo me quedaba demasiado largo.
Hoy quiero hablarte sobre cómo todos esos microinfartitos que sucedieron la semana pasada con la caída de Instagram, nos demuestra (una vez más) por qué siempre nos dicen «No pongas todos los huevos en la misma cesta».
Por si eres de los que no se conecta a diario, te diré que hace unos días no es que Instagram cayese, es que tuvieron un fallo y deshabilitaron cuentas de todo el mundo por error.
A lo cual siguieron ataques de pánico de:
a) los que no podían acceder a sus cuentas
b) los que de repente les habían desaparecido miles de seguidores
He de decir que los que usamos Instagram principalmente como entretenimiento estábamos tal que así
Anyway, se vivieron momentos interesantes, tropecientasmil personas publicando pantallazos de cómo sus seguidores habían bajado drásticamente y preguntándose qué sería de ellos.
El pánico se respiraba en el ambiente.
Se que suena a recochineo, pero imagina que eres un influencer y tus ganancias dependen de tu número de seguidores y de repente ves que no paran de bajar o que tienes una tienda online en Instagram… y ya no digamos si en cualquiera de los casos anteriores, de repente no te permite acceder… lo dicho pánico.
Pero bueno, que al final todo se solucionó, Instagram se dió cuenta del error, entiendo que tiraron de super backup y horas después ya se había reestablecido todo.
Ahora bien ¿A dónde quiero ir a parar?
A que las redes sociales son divertidas, son fáciles de manejar y llegas a muchísima gente y encima gratis, correcto.
Además se están espabilando hasta el punto de ofrecer montar tu tienda online directamente allí, pero… ¿y si esta caída hubiese durado más? O peor aún, ¿si no hubiese habido vuelta atrás?
Imagina que tu tienda se cae, o que eres un creador y todo tu contenido se pierde…
¿A que ahora ves los huevos revueltos?
Al final esto es como lo que ya hemos hablado en el pasado sobre tener un blog en una plataforma gratuita o tener tu blog en propiedad (del cual, por cierto, deberías tener también copia de seguridad en tu equipo, porque cualquier plataforma es susceptible de pérdidas de información).
Desde luego, siempre es una buena inversión de tiempo las redes sociales y los recursos gratuitos, pero deberías tener un plan B.
Y no sólo por posibles caídas del sistema, si ganas dinero con tu contenido, deberías plantearte la diversificación.
Te contaré una cosa, cuando empezó la guerra de Ucrania, sabes que hubo un bloqueo general hacia los rusos, hasta el punto en que creadores de contenido rusos en Youtube vieron que les bloquearon sus ingresos.
Eso amigo mío, es algo que nadie hubiera pensado, a fin de cuentas ¿qué tendrá que ver la fijación del presidente de tu país con el país de al lado, contigo que vives en casa de tus padres y haces vídeotutoriales?
Lo dicho, todos los huevos chafados…
Y hasta aquí, la reflexión del día ¿relevante? no lo se, pero me apetecía compartirla.
Buen día!